No voy

"La lluvia vuelve a mojar recuerdos de algún pasado gris. Algún pasado que cada vez esta más lejos, algún pasado que debería dejar atrás con las noches de verano en las que jurábamos nuestro amor. La luna y las nubes se persiguen entre saltos que hace un reloj. Nuestro reloj. El que avanza, el que nos aleja. Al único que se le permite distanciarnos con los minutos que avanzan lentos, pesados, torpes, aturdidos y hasta cargados. Escucho una pregunta, olvido la respuesta. Olvido deseado, olvido anhelado. Sacudo alguna presencia que me enfría, me humedece cada vez más y me encuentro rogando por la tempestad de tu piel. La que siempre quiere arder. La oscuridad, la confusión se rasga con cada recuerdo y muere en la primera lágrima que se atreve a enloquecer. Un cielo salpicado de lejanía no quiere más o es tan sólo lo que necesito pensar. La tormenta estalla en rojo y violencia. Pasión, nuestro terror. Vuelve a caer una gota que ruge al viento persiguiendo la gravedad, que tras un instante se convierte en agua que ha deslizado por mi soledad. El destino busca la exclusividad, alejarse de todo lo demás pero puedo ver la tormenta que ya se encuentra acá. La puedo ver en tus ojos, la puedo ver desde allá. La quiero ver más cerca, quiero ver tu alma. Quiero sentir tu boca, entrégame tu calma. Quiero escucharte callar mientras que me veo agonizar. Aspiro ser pregunta en el viento, quiero creer por única vez que no te pierdo."

Por Florencia López.